Rumbo a Esmeraldas: otra forma de comenzar las fiestas de San Juan

Cuando ya se oyen las dulzainas y todo huele a fiesta, jóvenes sorianos, fieles a nuestro compromiso solidario, partimos nuevamente, este verano, hacia Ecuador, para tener una experiencia misionera y desarrollar un proyecto de colaboración con los más pobres y desfavorecidos. La iniciativa comenzó hace dos años de la Delegación de Pastoral de Juventud como compromiso por la justicia y el desarrollo de hombres y mujeres que viven en situaciones de extrema pobreza. El lugar donde vamos a desarrollar nuestro servicio vuelve a ser Quinindé y recintos aledaños, en plena selva ecuatoriana, dentro de la provincia de Esmeraldas, con comunidades afroecuatorianas e indígenas.

Los jóvenes sorianos, con estas iniciativas, queremos abonar el terreno para concienciar sobre la necesidad de una misión diocesana, donde puedan prestar sus capacidades indistintamente todo hombre o mujer que sienta la llamada a la misión ad gentes y el servicio a los más pobres.

El joven es por naturaleza idealista y no está de acuerdo con la realidad que le rodea. El espíritu solidario de los jóvenes sorianos pasa muchas veces desapercibido, por eso iniciativas como esta ayudan a mostrar la riqueza de nuestros jóvenes.

El próximo día 22 de junio, a las 7 de la tarde, en la iglesia de san Juan de Rabanera tendrá lugar el envío misionero de los siete jóvenes que participaremos este año en dos tandas. Con el chupinazo en la explanada de Valonsadero el Jueves La Saca, además de los murlacos, saldremos rumbo a Esmeraldas el primer grupo con la ilusión de saber que no hay alegría mayor que «hacer el bien».

Agradecemos las muestras de generosidad y apoyo que estamos recibiendo, nos sentimos muy afortunados. Sin ellas no saldría adelante proyectos tan hermosos como este.

Unidos en la misión,

Alberto Cisneros Izquierdo, Delegado de Pastoral Juvenil de Osma-Soria

Comparte esta noticia
Facebook
X.com
LinkedIn
WhatsApp
Email