Cáritas Diocesana de Osma-Soria ha agradecido, mediante una nota de prensa, la excepcional colaboración con los damnificados por el terremoto que se produjo en Haití el pasado 13 de Enero. En la nota se afirma que «han sido cientos las personas que, bien a través de los donativos personales en las parroquias, en las oficinas de Cáritas Diocesana, o bien a través de las cuentas abiertas en las principales entidades bancarias, han colaborado para que en éste momento superemos la cifra de los sesenta mil euros recaudados» en apenas una semana.
Este dinero, del que ya han sido enviados 20000€, se une al de toda la Confederación de Cáritas Española que desde el primer momento ofreció a la Cáritas de Haití el apoyo «en todo lo que necesitasen», a la par que se hizo un primer envío de 175000 € con el fin de que se pudiesen poner a disposición los medios más urgentes.
Desde ese momento, la red Cáritas está llevado a cabo un operativo sin precedentes para afrontar la primera fase de la emergencia. Gracias al esfuerzo logístico del personal de Cáritas, dentro y fuera del país caribeño, ha sido posible trasladar con éxito hasta Puerto Príncipe un convoy de 20 camiones con un cargamento de 200000 mantas, 15000 tiendas de campaña y otros lotes de productos de primera necesidad como agua potable, tabletas purificadoras de agua y kits higiénicos. Este envío se suma al de otros 80 contendores con alimentos que han llegado a la isla por vía marítima y que se verán completados con otras 34 toneladas de ayuda que llegaron el pasado 18 de enero a Haití.
El Delegado episcopal de Cáritas en Osma- Soria, Francisco Javier Santaclotilde Ruiz, agradece en la nota de prensa todo lo que tanta gente está «haciendo y cuanto puedan hacer para que nuestra cercanía y ayuda fraterna pueda contribuir a convertir esta situación dramática en una situación de esperanza». «Las necesidades de emergencia y la posterior reconstrucción de Haití, afirma el Delegado de Cáritas en la Diócesis, van a ser una labor larga e intensa que hace imprescindible animar la solidaridad y el compartir fraterno de todos los católicos y personas de buena voluntad que confían en Cáritas, en la acción caritativa de la Iglesia, para ofrecer ayuda a los hermanos sufrientes de Haití».