El Seminario diocesano «Santo Domingo de Guzmán» ha acogido durante la jornada de hoy, sábado 15 de octubre, el primero de los tres encuentros de monaguillos que la Delegación episcopal de pastoral vocacional de la Diócesis de Osma-Soria ha preparado para el presente Curso pastoral 2011/2012.
Un total de 12 chicos llegados de algunas parroquias de la capital soriana (El Salvador y Santa María La Mayor) y de otras localidades de la Diócesis (Langa de Duero, Osma, San Esteban de Gormaz, El Burgo de Osma y Duruelo de la Sierra) han compartido con los 17 seminaristas un día de convivencia, de oración, reflexión y diversión.
La jornada ha arrancado pasadas las once de la mañana en el Monasterio de las MM. Carmelitas de la Villa episcopal. Allí los niños y adolescentes han conocido la vida de las religiosas de clausura, en el día en el que la Iglesia celebra la fiesta de Santa Teresa de Jesús. Tras este encuentro se han dirigido hasta la S. I. Catedral donde han podido conocer la vida de otro gran hombre -éste del S. XVII-, el beato Juan de Palafox y Mendoza, ante cuyas reliquias han rezado durante unos minutos.
La comida, a las dos de la tarde y tras haber podido conocer más de cerca las instalaciones y el estilo de vida del Seminario, ha dado paso a un partido de fútbol entre los seminaristas y los monaguillos.
Tras el encuentro deportivo, los niños y adolescentes han reflexionado en torno a la vida de otro gran cristiano, el beato Juan Pablo II. En este encuentro, unidas las vidas de Santa Teresa de Jesús y de los beatos Juan Pablo II y Palafox, se les ha propuesto, en palabras del delegado episcopal de pastoral vocacional, Rubén Tejedor Montón, «la santidad como la más alta y mejor meta de la vida […] pues todos estamos llamados a este destino que puede ser alcanzado por todos en las distintas vocaciones a las que Dios llama».
Un video sobre la vida del Papa beato, unos momentos de reflexión en torno a la vocación al sacerdocio, algunas preguntas de los presentes y la foto de grupo han puesto el broche de oro a este primer encuentro de monaguillos en el Seminario diocesano.