Aquí estoy, envíame. Se ha repetido una y otra vez esta afirmación, lema de la Jornada del Domund de este atípico 2020, en la Vigilia de la luz organizada por la delegación de Misiones que se celebró en la parroquia de Santa Bárbara de la capital soriana el viernes 16 de octubre, en vísperas de la Jornada del Domund del domingo 18.
Los símbolos del agua, la sal y la luz fueron los elementos que sirvieron para vertebrar la vigilia, ante el Santísimo Sacramento expuesto desde el comienzo por nuestro Obispo Abilio. La oración fue acompañada por la lectura de la Palabra, los momentos de reflexión, los cantos y los entrañables testimonios enviados en forma de vídeos por algunos de los misioneros sorianos en tierras lejanas: Julia Pardo desde Venezuela, Emilio José Almajano desde Camerún y Carmen Lagunas desde Bolivia.
En la pequeña homilía, Mons. Martínez Varea recordó la importancia de la labor y entrega de los 95 misioneros enviados por la diócesis de Osma-Soria y de los aproximadamente 10.000 españoles que trabajan en territorios de Misión y compartió brevemente su experiencia cuando visitó a Emilio José Almajano en la misión de Camerún el pasado mes de febrero, junto al delegado de Misiones Alberto Cisneros y el entonces seminarista, ahora recién ordenado diácono, José Antonio García Izquierdo. Asimismo habló de la necesidad de la colaboración de todos para seguir sosteniendo las misiones que tanto hacen por la promoción humana y la evangelización de los más desfavorecidos.
Estuvo presente en la vigilia un hermano de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, Santiago García Ortega, que ha venido a pasar unas breves vacaciones con la familia desde su residencia habitual en su lugar de misión actual, Santiago de Chile. Es el único misionero que ha podido venir este año, a causa de la pandemia de coronavirus.
Ese mismo día a las 10 de la mañana había tenido lugar una rueda de prensa en la que el delegado de Misiones y el Sr. Obispo habían presentado la Jornada del Domund 2020.
