La parroquia de San Esteban de Gormaz renovó esta Semana Santa las 14 estaciones del Viacrucis que cada Miércoles Santo protagonizan los quintos de la localidad después de 22 años mostrando los mismos dibujos que realizaron en su día un grupo de chavales de la parroquia. La lluvia, el paso del tiempo y la exposición en la calle, que es por donde se realiza esta procesión con el Cristo de la iglesia románica de San Miguel llevado a hombros por los jóvenes de la Villa ribereña, habían ido dañando las imágenes; por eso los catequistas decidieron pintar 14 nuevas escenas con un material más resistente que cautivó a los fieles de la localidad. Un trabajo duro que han realizado proyectando dibujos sobre paneles de madera que posteriormente pintaron en acrílico para hacer frente a los problemas meteorológicos que puedan tener en los próximos años. Su objetivo era que estuviera listo para esta Semana Santa y lo consiguieron implicando a los niños de primera Comunión que presentaron al resto de la parroquia los dibujos en la Misa del Domingo de Ramos.
Después los quintos fueron los encargados de colgarlos en balcones y ventanas para indicar las paradas de este emotivo Viacrucis que reúne en la localidad a vecinos de todas las edades pues, aunque está protagonizado por los jóvenes, siempre acuden padres, abuelos y chavales de otras edades para demostrar la pasión por la Semana Santa en la primera procesión en la que el grupo de cornetas y tambores acompaña a la imaginería del Cristo crucificado. El objetivo para el próximo año es hacer una nueva estación con la representación de la Resurrección, lo que supondría el broche de oro a este proyecto de trabajo envuelto como regalo para los jóvenes y la parroquia de San Esteban.
