Los días 23 y 24 de noviembre, se celebraron las XXX Jornadas de Pastoral del Trabajo en Ávila con el lema “El gran tema es el trabajo”. A dichas jornadas asistieron, Mons. Abilio Martínez Varea, como responsable de este campo en la Conferencia Episcopal Española y la Directora del Departamento de Pastoral del Trabajo en la Diócesis, Ana Isabel Dulce Pérez. El encuentro contó con cerca de 200 personas provenientes de diócesis, movimientos especializados y eclesiales.
Este año se celebra el 30 aniversario de la aprobación del documento “La Pastoral Obrera de toda la Iglesia”, un hito para una pastoral que, tras tres décadas de existencia, sigue demostrando su relevancia en el corazón de la misión evangelizadora de la Iglesia.
Comenzaban las jornadas con las palabras de D. Abilio Martínez, obispo responsable de esta pastoral, que hacía hincapié en que este momento es un “punto y seguido” en el que urge incorporar temas esenciales de esta pastoral como la siniestralidad laboral y las víctimas, los derechos de las personas migrantes y los anhelos de la juventud.
Cabe destacar la participación de dos secretarias de Estado del Vaticano: Alessandra Smerilli, Secretaria del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, que desarrolló la ponencia “La Pastoral del Trabajo en la Pastoral General de la Iglesia” y Emilce Cuda, Jefa de Oficina de la Pontificia Comisión para América Latina con la ponencia “El trabajo en el Pontificado de Francisco”. Ambas, con su presencia, reafirmaron que la pastoral del trabajo es una prioridad no solo para la Iglesia española, sino para la Iglesia universal.
Finalizaban las intervenciones con la ponencia de D. Fernando Carlos Díaz Abajo: “La Pastoral del Trabajo, Iglesia en salida. A los treinta años de la aprobación del documento “La Pastoral Obrera de toda la Iglesia”, en la que realizó una memoria del trabajo realizado en este tiempo y lanzó propuestas de por dónde seguir caminando.
También pudimos escuchar a Unai Sordo, Secretario General de CCOO, que agradeció el papel de la Iglesia en defensa del trabajo decente.
Dentro de las Jornadas hemos podido ver la exposición itinerante “Rostros y retos del mundo del trabajo”. Esperamos presentarla en nuestra diócesis a principios de 2025.
Entre las conclusiones más destacadas de estas jornadas está el reconocimiento de la tarea realizada a lo largo de los años desde los movimientos apostólicos, parroquias y diócesis, con especial atención a las periferias del mundo del trabajo. Asimismo, se destacó la afirmación de la experiencia sinodal, valorada por las representantes de la Curia Vaticana como una expresión concreta de “ser Iglesia hoy”, comprometida y en salida.
Hoy, el trabajo sigue siendo una necesidad, parte del sentido de la vida y clave para comprender la cuestión antropológica y socioambiental. La pastoral del trabajo busca precisamente visibilizar esta dimensión, afirmando la centralidad de la persona y promoviendo una cultura del trabajo que construya fraternidad y cuide de la dignidad humana.
El futuro de la pastoral del trabajo pasa, además, por favorecer encuentros que conecten lo local con lo global, potenciando a los movimientos especializados, estableciendo relaciones con las comunidades eclesiales y organizaciones del pueblo comprometidas con la centralidad del trabajo, para el cuidado de la dignidad humana y del planeta. Iniciativas como Iglesia por el Trabajo Decente o el acompañamiento a víctimas de siniestralidad laboral han demostrado que son oportunas en la promoción de una justicia social transformadora.